Ana de Armas contempla altiva, desde el balcón de la mansión, reina recién coronada, a la manada wasp que la ha tratado con el disimulado menosprecio que la América blanca más rancia reserva para su mano de obra esclava inmigrante. Así, Rian Johnson emplea también esta cinta para modelar una alegoría de la situación política que atraviesa Estados Unidos en estos tiempos vacuos y ejercer a la vez cierto derecho a la justicia poética, una suerte de victoria moral que, como todas las de esa clase, no sirve para nada. Sin embargo sí puede ser un aval suficiente para que Ana de Armas, actriz cubano-española, consiga figurar en todas las nominaciones a premios que están por llegar, y lo haga por delante de sus compañeras de reparto: el histrionismo siempre al borde de un ataque de nervios de Toni Collette o el aplomo actoral indiscutible de Jamie Lee Curtis.
Al director Rian Johnson lo descubrí en la estupenda
“Brick”, aquel sorprendente paseo hard boiled por un instituto de secundaria.
Su carrera continuó con éxito por los saltos temporales de “Looper” y, hablando
de saltos, el siguiente fue ni más ni menos que al hiperespacio en el “Episodio VIII: Los últimos jedi”.De este modo, habiendo demostrado sobradamente su capacidad
como director solvente y guionista original, apuntala su trayectoria en una de
un género ausente de cualquier moda o tendencia en boga, una intriga de asesinatos
en mansión antigua que en ningún momento huele a naftalina y que reverdece
páginas amarillentas de viejas novelas de bolsillo.
No la tenía en el radar a esta. Me la anoto.
ResponderEliminarQue tengas un buen fin de año y un excelente 2020, Licantro
Abrazo grande! Pasala bien!
Salud!
Qué bien me lo he pasado con ella.
ResponderEliminarBeso
Hildy