lunes, octubre 22, 2012

"Surcos", de José Antonio Nieves Conde


Diálogos cinéfilos, extractos neorrealistas.

De: Licantropunk
Enviado el: lunes, 22 de octubre de 2012
Para: The Flying Draughtsman (nombre supuesto)
Asunto: Surcos


Hola, The Flying Draughtsman (nombre supuesto),
Anoche estuve viendo “Surcos”. La saque de la biblioteca de Garrido.
Me recordó a “Rocco y sus hermanos” aunque me parece que ésta de Visconti es posterior (y creo que mejor: de todos modos hay un pasaje en “Surcos” donde hacen una gracia sobre el neorrealismo que me gustó mucho, cuando el Chamberlain y su “chati” van al cine). ¿Se inspiraría el director italiano en ella?
“Surcos” está muy bien en cuanto a que pone en escena, de modo casi documental, aquella época de los años cincuenta, en Madrid. Es verdad que al principio habla de un tren “Salamanca-Valladolid”, a ver si es que antiguamente el tren Salamanca-Madrid pasaba por Valladolid, no sé. Pero la película es bastante propagandística (leí a Torrente Ballester en los créditos como coautor del guión: me suena que hizo algún guión más), claro, “de interés nacional” para educar al público: los peligros de la gran ciudad frente a la idílica vida campesina, que lo mismo no era tan idílica. En aquella época el campo empezó a despoblarse pero supongo que nadie se atrevió a predecir hasta qué punto iba a llegar el tema: en los pueblos no quedó ni el Tato.Chico, con las cuatro cosas que te mando y algún adorno para rellenar, prácticamente tengo hecha la entrada…Voy a mandar copia a Licantropunk por si acaso, je ,je.


De: The Flying Draughtsman (nombre supuesto)
Enviado el: lunes, 22 de octubre de 2012
Para: Licantropunk
Asunto: RE: Surcos


Sí, espero leer ese comentario. 
A mí me llamó la atención el trato a las mujeres que se entrevé. A los niños, también. Y el mensaje es clarísimo. ¿Qué me dices de la escena del teatro con Marujita Díaz y los reventadores? ¿Y la vida en la corrala? ¡Y cómo tratan al padre! Es muy interesante.
Saludos, Licantropunk. Te tienes que apuntar a "(título de excelente serie de televisión estadounidense que no viene al caso)".

De: Licantropunk
Enviado el: lunes, 22 de octubre de 2012
Para: The Flying Draughtsman (nombre supuesto)
Asunto: RE: Surcos

Pero, ¿esa es la Marujita Díaz que ha estado los últimos años en el candelero o es su madre o su abuela? No se me parecía en nada a la moderna.
Y sí, lo del teatro y lo de la corrala está muy bien, es de lo mejor de la película, cómo se presentan esas escenas que eran cotidianas y ahora nos parecen rarísimas. O lo de cómo robaban los camiones: contrabando y estraperlo. Lo del padre fregando los platos no sé si era muy normal, pero lo de que a más de uno se le iba la mano con la mujer o con la novia, eso debía ser de lo más corriente: ese carácter latino del “tú eres mía o de nadie”, que tristemente sigue dando titulares. Cuánto tema, me va a salir muy larga la crónica.

¿No te dije que ya andaba en "(título de excelente serie de televisión estadounidense que no viene al caso: la de antes)"?
(... y etc., etc.) 


domingo, octubre 14, 2012

Revista. La Caja de Pandora nº 5 "Mad Doctors"

La revista "La Caja de Pandora" saca a la calle su quinto número: no hay quinto malo. Para ejemplo de malos, de malvados antológicos, bastará con contemplar algunos de los Mad Doctors que aparecen en sus páginas: de nuevo un tema común a abordar desde múltiples puntos de vista y ahora le toca el turno a las mentes privilegiadas que abren puertas infernales.

Este pequeño Licantropunk contribuye con un artículo sobre la película "Los ojos sin rostro" de Georges Franju, director francés al que el Festival de Cine de San Sebastián le ha dedicado un amplia retrospectiva en la pasada edición. La figura de Georges Franju como emblema de creatividad cinematográfica: la obsesión y el compromiso: cine hasta sus últimas consecuencias. Cine lleno de ambición, falto de codicia.

Pero "Los ojos sin rostro" no es más que una propuesta entre las muchas que contiene este ejemplar de "La Caja de Pandora": páginas llenas de invitaciones. Aquí se puede examinar el sumario y acceder a la lectura y/o descarga de la revista.

O pinchando aquí.

jueves, octubre 11, 2012

"Soldado azul", de Ralph Nelson


No me creo nada de "Soldado azul".

No me creo a Candice Bergen, valkiria nórdica de mandíbula de acero, en el papel de raptada y reconvertida (¿"Homeland"?) a la causa Cheyenne: síndrome de Estocolmo de la pradera. La mayor preocupación de la cinta en cuanto a esta actriz será la de exhibir su erotismo hippie (el famoso cartel de la chica india con las manos atadas a la espalda: hay versiones con y sin falda, supongo que para países con y sin censura: en la cabecera el cartel de su estreno en España en 1972, al final, el de su reestreno a principios de los ochenta). Mejor más adelante, en otra de aroma western: "Muerde la bala" de Richard Brooks.

No me creo a Peter Strauss disfrazado de soldado fronterizo, con alma de catequista y flequillo ye-ye, como recién aterrizado en pleno salvaje oeste. Su trayectoria en la pantalla grande no será gran cosa: en la pequeña se hará muy conocido como el hombre rico, junto a Nick Nolte, el hombre pobre.

No me creo el intento de comedía romántica: el amor que surge en las situaciones límite, el mundo contra dos provocando la unión sentimental imperecedera, un recurso trillado en el cine de acción de cualquier época. En las del oeste, también.

Tampoco me creo al hipermusculado jefe indio Lobo Moteado (Jorge Rivero), estampa de postal, o al no menos tópico coronel de caballería Iverson (John Anderson), tan aristocrático como despiadado: de postal también. Quizás me convenció Donald Pleasence haciendo de buhonero traficante de armas pero, tratándose de este excelente actor, lo contrario, que no me lo creyera, hubiera sido sorprendente.

Queda la masacre, la matanza del poblado de Sand Creek, un giro brutal para una película que ya había comenzado con el exterminio y el arranque de cabelleras de la columna de soldados a la que pertenecía el soldier blue. En esta revista de la película, los años no han pasado en balde: atrezo cutre para la puesta en escena de la barbarie más vil: miembros de maniquíes despedazados, despeinadas cabezas de plástico dando botes por el suelo, muñecos ensartados y mucho ketchup: los cuchillos largos con los pantalones bajados y las squaw despojadas de sus ropas. La fiesta de la violación y la muerte, tan afín a la salvaje historia de la humanidad, pasa al celuloide en una industria cinematográfica que no estaba acostumbrada a tanta violencia explicita y se proyecta para un público que no sabía quiénes eran los malos. La película es del año 1970: comparación inmediata con la guerra del Vietnam y de otra brutalidad reciente para la época: la masacre de My Lai de 1968. Las guerras son injustas y el héroe bélico es un asesino de masas.

En realidad lo que sucede con "Soldado azul" es que cuesta creerlo, pero lo peor es que casi seguro que fue verdad.

sábado, octubre 06, 2012

"Las aventuras de Tadeo Jones", de Enrique Gato

La mejor noticia de ver "Las aventuras de Tadeo Jones" se produce al leer los créditos del final de la película: en España existe una estructura empresarial e industrial adecuada para producir películas de animación y que está suficientemente consolidada como para obtener una calidad sobresaliente. Tadeo Jones además ha arrasado en taquilla desde su estreno, un éxito que se puede achacar a la intensa promoción que ha tenido la cinta producida por Mediaset (Telecinco Cinema, que lleva más de una década en la industria cinematográfica nacional) pero que en cualquier caso no será muy distinto del bombardeo comercial del que disfrutan habitualmente las películas de animación para el público infantil: niños, al cine a pasar la tarde.

Tadeo Jones y su compañera Sara Lavrof. ¿O habría que decir Indiana Jones y Lara Croft? El plagio del primero es tan evidente que sería inútil ocultarlo: al final de los créditos hay una "nota de agradecimiento" a Lucasfilm. ¿Habrá cobrado George Lucas -menudo es- sus regalías? Lo único que sería denunciable es el hecho de que el arqueólogo heroico de sombrero y látigo haya perdido todo su sex-appeal en su tránsito al cartoon. En cuanto a que Sara sea Lara, bueno, sólo hay que verla o pronunciar su nombre mientras se come un polvorón. No, no hay nota para Angelina Jolie en la película, pero igualmente desde aquí le damos las gracias. La trama también es típica y tópica: en busca de algo perdido. No se sale de lo esperable, no está mal (¡Ese golem de piedra!¡Esas momias! Bien, bien), aunque se agradecería que los chistes fueran mejores: ni José Mota doblando a uno de los personajes, Freddy, el ayudante peruano, consigue arrancarle risas a la platea llena de niños. Lo más curioso de esta cinta, partiendo de que el tal Tadeo Jones tiene pasaporte estadounidense y de que por España ni se asoma, son los detalles que resaltan el carácter hispano de la producción: el vuelo de Iberia entre Chicago y Lima (lo mismo existe: lo que es seguro es que Iberia ha puesto pasta para que salga su emblema), el utilitario que usa de tipo biscúter (¿un Isetta?), que Tadeo (con capote y montera) se ponga a torear un puma o que los malos de la película sean una empresa de cazatesoros llamada Oddyseus: ni más, ni menos: venganza en efigie para un nombre demasiado parecido a Odyssey, la compañía con la que el gobierno español mantuvo un litigio alrededor de la propiedad del tesoro de la fragata Nuestra Señora de las Mercedes. En fin, Tadeo Jones 2 ya estará en gestación, fijo.

Como decía, ya tenemos industria, ahora sólo faltan ideas.