Desmontando a Van Damme. El belga más famoso del mundo después de Tintín. Van Damme haciendo de Van Damme, ese joven campeón de karate que se buscó las habichuelas en Hollywood, que alcanzó fama mundial y que ahora, a punto de cumplir los 50, se mira al espejo: una carrera forjada a base de hostias que la vida le ha devuelto con creces: cinco matrimonios, adicción a las drogas, trastorno bipolar: ruina económica y moral. El declive del estereotipo de héroe de acción de los 80, lleno de esteroides y violencia sanguinaria: ahora pega más el estilo Bourne de Matt Damon: un chaval cualquiera repartiendo estopa. Van Damme se confiesa ante la cámara y llora, un logrado momento en que el superhombre, siempre por exigencias del guión para lo bueno y para lo malo, se vuelve un pobre hombre: el ídolo cayendo.
Película de atraco chapucero con rehenes al estilo de "Tarde de perros" de Sidney Lumet (uno de los ladrones, el más violento, tiene un peinado clavado al de John Cazale: nítido homenaje) o de "La estanquera de Vallecas" de Eloy de la Iglesia (esta no creo que la haya visto el director, pero seguro que le iba a gustar). Brillante, divertida, ágil: sorprendente director aunque se embarulla un poco al final pero mantiene un buen nivel en toda la cinta, con alguna escena sobresaliente.
The Muscles from Brussels ha logrado un puñado de buenas críticas con su actuación en esta película: hay vida más allá del alcance de las patadas voladoras. Desmontar y reciclar. Pues que le vaya bien.
único e inimitable ...a ver que actor tiene cojones de interpretarse a si mismo
ResponderEliminarDe los repartidores de mandobles, éste era de los que mejor me caen, sin duda. La película se me escapó, como la de de Rourke, otro ídolo caído resurgiendo de sus cenizas. Saludos.
ResponderEliminarHola! está muy bueno tu blog, y muy bien fundamentadas las opiniones, varias cosas que dan ganas de ver!
ResponderEliminarhey! muchas gracias por tu comentario! me alegro de que te gusten mis trabajos (y que te hayas recorrido el blog íntegro)! estamos en contacto!
ResponderEliminarLa tengo programada para el fin de semana, así que si me acuerdo me paso por aquí y te cuento...
ResponderEliminarVan Damme siempre me cayó simpático y este trabajo parece a priori bastante interesante; los ídolos caídos siempre dieron mucho juego en el cine...
Interesante blog. Un saludo.
Especiero: pues es verdad que hay que echarle un par para confesarse de ese modo frente a la cámara. Aunque estos famosos están hechos a todo.
ResponderEliminarAngelus: pues esta se puede perdonar pero "El luchador" de Rourke... imperdonable perdérsela.
Andrés Casciani: abrimos una línea Godoy Cruz - Salamanca ya mismo.
Kinezoe: ojalá te acuerdes. Lo mejor del rollo bloguero es compartir opiniones.
Saludos a todos.
Pues finalmente me acordé... ;-)
ResponderEliminarMe ha parecido una gran película. Probablemente, la película más madura y sincera de cuantas atesora el amigo Van Damme. Me gustó también el punto cómico que le han dado: hábil forma de presentarnos una gran tragedia...
Van Damme haciendo de Van Damme... Jeje... Fue muy bueno. Espero que esto constituya un revulsivo en su carrera. Vuelvo a repetir que me cae simpático este actor. Ya veremos qué es lo próximo...
Lo mejor del film, la escena en que llega a la oficina de correos y el monólogo frente a cámara. Sin duda, su mejor papel en cine.
Un saludo, amigo.
Esta peli tenía unas ganas brutales de verla en Sitges, pero la dejé pasar y eso que todo el mundo decía que era de las mejores...
ResponderEliminarmira, me la voy a poner a bajar y a ver si antes de que acabe la semana te cuento lo que me parece
Kinezoe: ¿A qué esperan para ofrecerle un "Hamlet"? ¿No hizo uno Mel Gibson? Bromas aparte, es una gran película. Simpatía por Van Damme, otro juguete roto. Me alegro de que te gustase.
ResponderEliminarIbán: eso espero. ¿Sitges, eh? Qué puta envidia.
Saludos a los dos.