domingo, febrero 03, 2013

"Los productores", de Mel Brooks

La ópera prima de Mel Brooks, la primera de una exitosa carrera dedicada a escribir y dirigir parodias, películas cómicas con sello de autor, una tras otra, en las que se caricaturizaban diversos géneros cinematográficos de estética inconfundible: el western, el de terror, el cine mudo, el de suspense, el histórico, la ciencia ficción. Los gags más ocurrentes (no siempre), los actores más alocados (casi siempre), hasta lograr algunas de las escenas más recordadas y divertidas de la comedia en el séptimo arte.

"Los productores" es una peculiar sátira del montaje de espectáculos para Broadway, el famoso circuito teatral de Nueva York, con el que Mel Brooks tuvo mucha relación, y por supuesto es una película que también tiene sus momentos divertidos, aunque su característica más llamativa sea el alto nivel de riesgo y transgresión ("Sillas de montar calientes" será otra de las destacadas en ese aspecto: se aborda el tema del racismo sin miramientos ni concesiones a lo políticamente correcto) que la historia planteada pone en pantalla: montar un musical de bajo coste alrededor de la figura de Adolf Hitler, llamado "Primavera para Hitler", con el timador fin de que sea un fracaso absoluto y no haya que devolver ni un dolar a los inversores, una colección de ancianas millonarias que firman suculentos cheques a favor de un gigoló imposible, el productor sanguijuela Max Bialystock (interpretado por el actor Zero Mostel: excesivo y extenuante, pero le da el carácter necesario a la cinta). Bialystock y su histérico socio Leo Bloom (Gene Wilder en años de plenitud: "Bonnie & Clyde" de Arthur Penn, "Willy Wonka y la fábrica de Chocolate" de Mel Stuart y con Mel Brooks "Los productores", "Sillas de montar calientes" y, por supuesto, "El jovencito Frankenstein", una obra cumbre en su carrera) realizan sus planes y llevan a escena una obra protagonizada por un Hitler gay y hippy (Dick Shawn, que en la película hace del actor Lorenzo St. DuBois: L.S.D. para los amigos), con números musicales en los que se canta al paso de la oca y las bailarinas forman esbeltas cruces gamadas. Un éxito.
¿Qué le gusta al público?

5 comentarios:

  1. Mr. Licantropunk, Mel Brooks, un clasico de todos los tiempos; Wilder genial como siempre; para poder entrar mejor en el personaje, Kenneth Mars dormia todas las noches con su atuendo. Saludos.

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  2. La vi hace un par de semanas pero una versión del 2005, con Brodorick y Nathan Lane. Qué gracia...

    Pero no puedo comparar porque no he visto ésta que usted menciona.

    Saludos!

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  3. Un musical gamberro, gamberro, gamberro... y con bastante ingenio.

    ... Yo cada vez que veo la representación de la Primavera... Madre mía, qué despropósito.

    Y jamás vi a un seductor tan poco apetecible como Zero Mostel...

    Lo políticamente correcto no existe en Los productores.

    Y es buenísima la incógnita que propones (que es la premisa gamberra de esta película): nunca se sabe qué es lo que va a funcionar o lo que va a fracasar estrepitósamente en los escenarios (u otros soportes artísticos). Y ¡madre mía, lo que puede tener éxito...!

    Yo, al contrario que Marga, sólo conozco esta versión. La de 2005 no la vi y tampoco fui al teatro cuando la representaron por estos lares Santiago Segura y José Mota...

    Besos
    Hildy

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  4. Belknap: es verdad, no he mencionado otro de los papeles destacados de la película, el de Franz Liebkind, antiguo nazi y autor de la obra, que interpreta Kenneth Mars. Si se preparaba el papel como tú aseguras, no me extraña el resultado: metido hasta la médula.

    Marga: pues yo esa no la conocía, te la cambio.

    Hildy: ¡vaya!, esta película tiene múltiples versiones. Pues no es mala señal, seguro que en la época y antes de que Mel Brooks saltara a la fama y el público ya se esperara esos chistes de grano grueso, la cinta debió impactar. Y en la obra teatral que mencionas, Santiago Segura haría el papel de Max Bialystock, ¿no? A José Mota le falta cuerpo, creo yo...

    Saludos a todos.

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  5. Una de las peliculas que mas me he reído. Esa frase de directos al fracaso o algo asi traducicida....Digna de entrar en los anales del cine. Gran obra profundamente incorrecta, superior a la que hicieron después en la década pasada. Aunque el remake, tampoco estaba mal. Saludos

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