viernes, enero 14, 2011

"Trainspotting", de Danny Boyle

Renton y Spud corriendo por una calle, perseguidos por haber mangado en una tienda, mientras suena la potente batería del "Lust for life" de Iggy Pop y la voz en off de Ewan McGregor enumera los numerosos motivos que conducen a la adicción: Choose life, choose a job, choose a career, choose a family, choose a fucking big television, choose washing machines, cars, compact disc players and electrical tin openers. Múltiples elecciones que conducen a un destino de mediocridad y estupidez, de angustia vital y egoísmo: exactamente lo mismo que produce estar enganchado a la heroína, sólo que el yonki no se entera mientras siga colgado. Cuando estás enganchado hay una única preocupación que es pillar más: la vida corriente desaparece. Full time business.
Coge el mejor orgasmo que hayas tenido, multiplícalo por mil y ni siquiera andarás cerca. La película, basada en la magnífica novela de Irvine Welsh sobre un grupo de jóvenes drogadictos y delincuentes que sobreviven en Edimburgo en los años 80, está lejos de cualquier intención moral: transgresora e impactante, con unos puntos cómicos míticos: Renton sumergiéndose en el peor retrete de Escocia y apareciendo en lo que podría ser la portada del "Nevermind" de Nirvana o Spud mostrando los efectos del speed en las entrevistas de trabajo. Desdramatización. En aquellos años los problemas de adicción a las drogas tenían proporciones de epidemia nacional y sus consecuencias eran muy visibles: la figura del yonki era tan habitual en el paisaje urbano como la de una cabina telefónica (te los encontrabas en cualquier punto de la ciudad, te acompañaban por toda la calle Toro, por la Plaza Mayor hasta la estación de autobuses: enróllate, dame algo, hoy por ti mañana por mí, ¿no llevas nada suelto?, todo lo que tengas para mí; entre el ruego y la amenaza, conseguir lo que sea: un chute por dos mil pelas; o aparecía alguno de madrugada sentado en un bordillo, llorando porque se le había salido el pico mientras un brazo sangrante colgaba inmóvil). Aunque el asunto no te hubiera llegado más cerca que en forma de un amigo o conocido (casi seguro que alguno había; si se trataba de un familiar: punto y aparte) sabías de sobra la dimensión del embolado. A todo ello se unieron cuatro letras como los cuatro jinetes del apocalipsis: S.I.D.A.: cadáveres de 30 kilos. Por tanto ir al cine y ver "Trainspotting" era obtener una visión diferente, una ruptura con lo establecido, pero a la vez una constatación: bebés muertos como símbolo del adiós a cualquier esperanza: la adicción deja paso a la depresión y el bajón: la fiesta de los 80 terminó (otra gran película sobre la droga, sobre todas las drogas es "Réquiem por un sueño" de Darren Arofnosky). Las películas de Eloy de la Iglesia que habíamos visto eran otro cine, más amargo, más cruento, pero lo que ofrecía la cinta de Danny Boyle era sorprendente. Si aquello buscaba ser realista esto otro era más... surrealista.
Una banda sonora fabulosa y unos actores que saltaron a la fama mundial. Entre ellos destaca Ewan McGregor que ha alcanzado la cumbre (¿qué puede haber más allá de interpretar a Obi-Wan Kenobi?: poca cosa) y se ha mantenido ("El escritor" de Roman Polanski, por ejemplo). Otros han tenido una suerte dispar, como Robert Carlyle (el violento Begbie, el personaje más inquietante de la trama: tener un amigo broncas es como llevar al lado un mono con una ballesta, confirmo) cuya trayectoria de éxito parece que se apagó después del triunfo impresionante de "Full Monty" de Peter Cattaneo o su papel protagonista en "Las cenizas de Ángela" de Alan Parker. También aparece el actor y director Peter Mullan, reciente Concha de Oro del Festival de San Sebastián por "Neds", haciendo de camello: la madre superiora: la que lleva más tiempo con el hábito: inolvidable mote.
La carrera posterior del director Danny Boyle halló un filón inesperado en la oscarizada "Slumdog millionaire", pero esa es otra historia.
"Trainspotting" es de culto. Absolutamente.

15 comentarios:

  1. Mr. Licantropunk, genial entrada, genial pelicula; aunque " Requiem... " tambien es muy buena, personalemente me gusta mas:" Trainspotting, son gustos. Un saludo.

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  2. Como postular sobre los peligros de la droga sin sermonear.

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  3. De las poquísimas películas que me han gustado más que la novela (quizás porque en el libro no oyes a Iggy Pop) Fui a ver "Transpotting" con un amigo que había dejado recientemente un centro de desintoxicación a causa de la cocaína. Me dijo algo que siempre recordaré: "Cuando te enganchas a una droga lo que en el fondo quieres es repetir los efectos del primer cuelgue, el mejor, cuando admites que no lo conseguirás ya te has desenganchado en un 50 por ciento." Borgo.

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  4. Excelente reseña, Licantropunk. Vi que esta semana la entregaban con "Público", el pasado viernes. No lo compré porque la tengo hace mucho tiempo, las películas que me gustan me las procuro cuando salen en DVD. Buen momento este para revisarla.

    Saludos!

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  5. Ésta me gusto mucho. Y eso que es inglesa (no hace falta que me lo eches en cara). Veré la de "Requiem..." pronto.

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  6. Lo que mas y menos me gusta al mismo tiempo de esta película es que se perece demasiado a mi vida, quitando que nunca estuve enganchado a la heroína, en concreto. Y que salí del cine con unas ganas de meterme un pico,jajaja.
    No, ya hablando más en serio. Es una de mis películas de cebecera.

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  7. Belknap: gracias. "Trainspotting" es otra cosa. Será complicado encontrar al que no le guste.

    Pepe Cahiers: lo mismo que la pelicula de Aronofsky que debería ser obligatoria para los adolescentes.

    Miquel Zueras: a nuestra generación le metieron el miedo en el cuerpo con la droga y el Sida. Probablemente era de las mayores preocupaciones de nuestros padres: ni pincharse ni follar sin condón.

    Babel: pues sí que la regalaban: ya tengo dos. Pero fue llegar a casa y no resistirme a ponerla.

    Tomás Serrano: el peligro de la palabra escrita: no puedes retractarte ahora. De hecho estoy pensando en preparar una batería de cine inglés en la que, una tras otra, tengas que decir que te gustaron mucho.

    Hijoeputa: los personajes que salen en la película son totalmente verosímiles. Por eso es una película tan buena, porque te crees que todo eso le puede suceder a alguien: menos lo del retrete, claro, pero eso pertenece al mundo onírico de los estupefacientes.

    Saludos a todos.

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  8. Ajá, de culto... sin moralinas ni argumentaciones huecas, "esto es lo que hay" nos contaba la peli (el libro no llegué a leerlo).

    Saludos mañaneros!

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  9. Ya he visto la de "Réquiem por un sueño" y he leído tu opinión de... 2006!!! ¡Cómo pasa el tiempo! Y era de 2000...
    Me ha gustado y me imagino que hace 10 años resultaba más dura todavía. Me quedo con tu comentario de que la tienen que ver los hijos...

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  10. La verdad es que yo no soy demasiado fan de Transpotting. No le veo el punto de culto. Cuanto menos lo soy de Slumdog millionaire, quizás la película más sobrevalorada en tiempos...

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  11. No he visto Trainspotting, aunque siempre me han hablado mucho de ella. No he visto zzine de Boyle, es como si, siempre, le tuviera pendiente y tu reseña me ha parezzido estupenda. Algún día tendré que verla. De Aronofsky sí he visto mucho zzine, casi todo el que ha hecho; es un direzztor que me encanta y de las drogas… pues ni idea, nunca las he probado, pero he estado enganchada a otras cosas que, seguro, me han hecho más daño, o el mismo, cualquiera sabe. Es lo que tiene colgarse con algo, mientras lo estás, flipas, o ni idea, ves tulipanes de colores y cuando te caes, te la pegas. Se llama dependenzzia, cosa terrible, tener que vivir dependiendo de algo.

    De cualquier forma, no soporto las moralinas, como casi nadie. Cada uno….

    Caperuzzita.

    Possdata: Lo dicho, estupenda reseña

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  12. Marga: las situaciones de la película son más realistas de lo que puede parecer en un principio.

    Tomás Serrano: "Requiem por un sueño" es una película impactante, con un ritmo fantástico: pocas películas serían tan efectivas para explicar qué son las drogas. Todas ellas.

    Ibán: ambas están a años luz. Supongo que la gente de mi edad tiene a "Trainspotting" en un pedestal: himno generacional.

    Caperuzzita: de Boyle sólo recomiendo ésta, el resto de su obra no me ha llamado la atención. En cuanto a dependencias: el veneno es la dosis, como en todo. Por ejemplo el cine: dependencia bendita: tiene sus flipes estupendos y también sus viajes chungos, claro.

    Saludos a todos.
    Choose life!!

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  13. Me gustó la peli en su momento.Gracias a ella descubrí al escritor Irvine Welsh y ahora soy adicto a su literatura.Te lo recomiendo.

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  14. De trainspotting me quedo con el arranque: espectacular. Alguien ha dicho que siempre buscas el primer cuelgue; en la peli buscas el arranque y lo halla en varias ocasiones.
    Muy buena reseña, sí señor!

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  15. "No tengo ningún defecto, bueno sí, que soy un perfeccionista..."

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