La cinta es un curso acelerado para dedos hábiles amigos de lo ajeno: prestidigitadores de bolsillos, carteras y relojes de pulsera: algo por aquí, nada por aquí. Aprendiz de carterista convertido a la cleptomanía por amor al riesgo pues parece que el dinero no sea su leitmotiv existencial: trajes ajados y cuartuchos de alquiler son ganancias mal invertidas, detalles intrascendentes para estajanovistas del hurto. El inadaptado social, el outsider que Paul Schrader tomó para construir su Travis Bickle, en una puesta en escena que recuerda a "El ladrón de bicicletas" de Vittorio de Sica: la víctima del robo, desarmada por el desamparo que inspira el personaje, se apiada del ladrón.
Martin LaSalle interpreta a Michel el carterista y Marika Green a Jeanne la vecinita y "Pickpocket" podría entenderse como una historia de amor entre ambos. Seres atormentados y desgraciados que se hallan y se pierden a lo largo del metraje. Michel muestra en sus arrebatos la mirada enérgica y lunática de un sociópata mientras que Jeanne baja los ojos con la belleza lánguida de una madonna de Botticelli: opuestos que se encuentran en su soledad, finalmente redimidos por el castigo: es la cárcel la que permite a Michel dar a conocer sus sentimientos en una película en la que los actores, como si se tratara de la primera función teatral de un grupo de aficionados, aparecen tensos, fríos, acongojados por el ojo de la cámara: marionetas en un encuadre que son marcas de autor.
Una película aparentemente simple, pero cargada de fuerza, sufrimiento y emociones contenidas. Una obra de arte.
ResponderEliminarSaludos
El comentario me ha gustado tanto que temo que la película se quede por debajo de las expectativas... como me pasó con la de Hiroshima. Creo que antes sacaré tiempo para Yojimbo.
ResponderEliminarMalbarismo y primeros planos sensacionales, me encanta esta película. Y das en el clavo: no roba por necesidad, es inmoralidad absoluta retratada con elegancia suprema. Bresson, otro genio de esto, saludos ;)
ResponderEliminarPickpocket es una obra maestra absoluta.Sólo basta ver el arranque de la película para saberlo.La fotografía es magnífica y la labor de Bresson en el montaje de la película es inolvidable.
ResponderEliminarMagnífica reseña para un director de primera.
Un fuerte abrazo.
Una de las grandes. Imprescindible para conocer a Bresson. Con excelentes planos detalle y montaje; y con la desdramatización característica del director que consigue llegar a profundizar en la mente humana y meter a los espectadores en ella.
ResponderEliminarLos que la han visto coinciden en calificarla de obra maestra, Tomás. Cinco no pueden estar equivocados. Algo tendrá está película.
ResponderEliminarSaludos a todos.