Crimen perfecto: aquel que la sociedad no castiga.
En el ámbito literario o cinematográfico (=cine y novela negra) el crimen perfecto se considera un logro intelectual del delincuente: conocidas todas las circunstancias e identificado el criminal, es imposible encontrar la prueba concluyente: In dubio pro reo. "Zodiac" de David Fincher, podría servir de ejemplo.
Otros crímenes llegan a la condición de perfectos porque nunca se llegarán a juzgar: echar tierra sobre el asunto. Echar tierra y no sacarla.
Dice el escritor: "A la democracia no ha llegado todo el mundo de la misma manera. Los hay que han llegado frescos, limpios, en magníficas barcas de salvamento. En cambio otros han llegado derrotados, extenuados, como los náufragos, y algunos no han llegado, devueltos por el mar, ya ahogados. Lo que no se les puede decir ahora a los náufragos es que costeen de su dinero y de su dolor los cruceros de placer en los que han viajado tantos durante estos años".
Ni condenas, ni castigos ¿para qué? Sólo justicia: culpable o inocente. Echar luz en vez de tierra. Ya toca.
Ajá, sólo no echar tierra y sacar la que haya y un poquito de luz. Estoy con Trapiello y contigo.
ResponderEliminarSin aspavientos ni rasgaduras, porque ya toca.
Abrazo, Licantropunk!
te invito a leer el cirmen perfecto en mi blog, se llama "la otra."
ResponderEliminarMagnífico parráfo has escogido. Hay que sacar todo a la vista, todo. Y dejar de costear hoy día las virutas del pasado, para empezar la corona, ese absurdo pago de impuestos.
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