viernes, agosto 11, 2006

"La boda del monzón", de Mira Nair


Cualquier zona del mundo que tenga tradiciones ancestrales y que en la actualidad se vea sumida en la aculturación de la civilización occidental, es lo que ahora se denomina tierra de contrastes. Creo que la película intenta hablar de esto, mostrando los abruptos abismos generacionales que se producen entre padres casados en matrimonios concertados e hijos que viven en la sociedad del chip, pero que también se ven obligados a aceptar las costumbres de sus mayores: se enseña que un noviazgo voluntario no asegura el éxito, fórmula que nadie posee. Así, la organización de una boda sirve de excusa para mostrar, no el choque sino la aceptación, pues entre los indios hay grandes comerciantes y hábiles negociadores (estuve en Andorra en una tienda llamada "Tagore", con dependientes hindúes llamados Jordi o Xavi: las hay por todo el mundo: el badulake). Sin embargo todo tiene su límite y al final lo más importante son el honor y la decencia. Palabras extrañas.
Mucha música raga y vistazos a la ciudad de Nueva Delhi le dan un toque poético. Por otro lado, aspecto Bollywood que le da un toque de culebrón venezolano.
Me gusto más "Quiero ser como Beckham".

3 comentarios:

  1. Es que "Quiero ser como Beckan" es pura realidad, es exactamente lo que ocurre entre los hijos y los padres de los emigrantes musulmanes en Reino Unido.

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  2. Sí, ese conflicto cultural esta en esa película mucho mejor representado, también teniendo en cuenta en que pais se desarrolla cada película.
    Un saludo.

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  3. Una rareza, esta pela, mi apreciado Licantropunk. Me pregunto si llegará por aquí...

    el tema da para variadas reflexiones, me interesa.

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