miércoles, junio 10, 2015

"Tierra prometida", de Gus Van Sant

La película del fracking: todo lo que usted siempre quiso saber sobre el fracking y nunca se atrevió a preguntar. ¿Qué es el fracking? Una definición tan sucinta como rotunda es la que una vez escribió mi amigo Pablo: el fracking es caca. Algún otro pensará, y defenderá, que se trata de una fuente de energía que hay que explotar y aprovechar, un recurso natural en el subsuelo de países que, hace tiempo, esquilmaron las reservas de cualquier cosa al alcance de la mano que se pudiera vender. Y ahí se puede encontrar el principal problema: la voracidad: maximizar el beneficio a base de reducir costes y relajar a la vez las mínimas precauciones y márgenes de seguridad que cualquier explotación industrial debe respetar sí o sí: en ocasiones es no. La economía mundial está al servicio de un grupo de ancianos residentes en el perpetuo verano de Miami, bronceados jubilados que exigen el mayor rédito a sus milmillonarias cuentas y a sus laberínticos entramados financieros: si la gráfica no sube hasta perforar el techo, te vas a la calle: búscate la vida y haz lo que tengas que hacer, que yo me voy a echar otros nueve hoyos.
Matt Damon y Frances McDormand interpretan a una pareja de representantes de una compañía gasística estadounidense. Su trabajo es convencer a granjeros del interior del país de que les vendan sus tierras, a sabiendas de que perforando debajo de ellas e inyectando agua a presión mezclada con diversos componentes químicos, se obtendrá el preciado gas natural atrapado entre las rocas: el prado del abuelo es una mina, quién lo iba a decir. Más allá de los imprescindibles dilemas entre ecologismo y capitalismo, entre conservar la heredad o canjear el billete de lotería, la cinta aborda el retorno al origen, a la sociedad primitiva del buen salvaje dedicado al trabajo agrícola y ganadero: el yuppie despierta de la pesadilla alucinada del capitalismo de ficción y queda atrapado entre la virtud del arado y las nobles camisas de franela. De la oficina al granero. Y que cante el gallo.

10 comentarios:

  1. Mi querido Licantropunk, siento debilidad por el cine de Gus van Sant. Y creo que esta película, que me parece bastante notable, hubiese merecido más visibilidad en el momento de su estreno. Porque habla y plantea muchas cosas... y sobre todo que No todo vale. Además de estar muy bien contada...

    Besos
    Hildy

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    1. No es la "rama" del cine de Van Sant que prefiero. Lo que me alucina de su obra es mucho más arriesgado y se compone de títulos como "Elephant", "Paranoid Park", "Gerry", "Last days"... En fin, creo que me entiendes de sobra. Pero, como pasó con "Mi nombre es Harvey Milk", el valor de estas otras películas del gran Gus será el de llamar la atención sobre estas cosillas que nos cuelan en cuanto nos descuidamos.

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  2. Estoy con tu amigo, fracking caca, mucha.

    Y me parto con tu personificación del capitalismo en esos cuatro viejos en Miami apretando clavijas. Tal cual me lo imagino yo.

    La película... psss, pues no sé qué decirte, lo de la conversión del lacayo del mal y ahora me paso al lado del bien agrario me escama un poco. O soy yo, que soy pelín puntillosa con estas cosas de las iluminaciones repentinas: o eras tonto antes o eres tonto ahora. Mala premisa en cualquier caso para fiarse de alguien.

    Saludos!

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    1. Eso de los viejos de Miami debí leerlo en alguna parte hace años y se me ha quedado clavado. ¡Qué imagen! De la película no me gusta como termina, demasiado buen rollo made in Hollywood.

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  3. No la he visto, pero tu reseña me recuerda a "Local hero". Como siempre, muy buena entrada.
    Un abrazo

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    1. ¡Qué puntería! Pues igual no me crees pero esa fue la película que me vino a la mente en algunos pasajes de "Tierra prometida". Al final no la he mencionado en la entrada, me dicen que pongo demasiadas referencias a otras películas en lo que escribo. Pero, qué quieres, soy un escorpión...

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  4. es verdad, el director es mas de "mostrar cosas" que de cuidar su cine... creo que me entendés...

    y me es inexplicable a los que elijen de protagonista a Damon... creo que tiene 2 gestos... puede ser resultón, que rinda, pero nunca descolla, ni de casualidad... salu2....

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    1. Matt Damon da muy bien en el tipo medio estadounidense: un cualquiera, con pinta de estudiante, red neck atildado, el perfecto tendero. Para mí si es el protagonista adecuado para esta trama.

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  5. La peli, muy buena. Tus comentarios, inmejorables. El fracking, mucha caca, así es. Abrazo

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    1. Gracias amigo. Como puedes comprobar tu breve frase fue muy didáctica: de las que fijan la idea al cerebro. Un abrazo.

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