martes, abril 01, 2014

"Ruby Sparks", de Jonathan Dayton y Valerie Faris

Los directores de "Ruby Sparks" fueron los responsables de aquella buena comedia de hace unos años titulada "Pequeña Miss Sunshine". Pareja de directores que además son marido y mujer, al igual que (me viene ahora a la mente) lo eran los cineastas franceses Jean-Marie Straub y Danièle Huillet ("Crónica de Anna Magdalena Bach" como título conocido), aunque su cine se localizaba en el entorno de la Nouvelle Vague, su generación, y tenía unos propósitos artísticos bastante alejados de lo que ofrecen Dayton-Faris. Straub-Huillet, Dayton-Faris, dos ejemplos de tándem artístico peculiar en la historia del cine (quizás no lo sea tanto y lo único peculiar sea la firma al alimón; tampoco). Peculiar podría ser también que la guionista de "Ruby Sparks", Zoe Kazan, sea la protagonista de la película, interpretando a la chica que da título a la cinta, y el ejemplo ahora es Matt Damon y Ben Affleck, que crearon el guión al que pondrían cara en "El indomable Will Hunting" de Gus Van Sant: a partir de ese éxito poco tiempo le dedicaron a la escritura. Si se puede dar ejemplos, en plural, entonces lo de guionista-actor tampoco ha de ser tan extraño. Zoe Kazan, ¿de qué me suena Kazan? Nieta de Elia, nada menos, me chiva la Wikipedia. ¿Dónde terminará esta lista de endogamia cinematográfica en la que me estoy metiendo hoy? ¿Terminará en que Paul Dano, protagonista masculino de "Ruby Sparks", es novio de Zoe Kazan desde hace años? ¡Vaya! ¡Voy a dejar de consultar la Wikipedia que esto se empieza a parecer al "Hola"!

Me recomendaron "Ruby Sparks" desde la comparación de su argumento con el de "Her" de Spike Jonze. En "Ruby Sparks" Calvin (Paul Dano), joven escritor, la promesa del momento para escribir la próxima gran novela americana, atraviesa una crisis espiritual: las musas pasan de largo, sobrevuelan impávidas su máquina de escribir portátil (cuando le vi sentarse a la máquina de marras estuve a punto de pasar a otra película, francamente, que hay mucho pendiente que ver). Pero una ensoñación madrugadora le arranca del sopor creativo y le arroja hacia una incontenible inspiración arrebatadora: un personaje femenino, Ruby Sparks (Zoe Kazan, como ya se dijo), le visitó en sueños. El escritor se enamora de esa experiencia onírica y es tan fuerte su amor, tan poderoso el sentimiento que le invade y que le tiene sujeto sin piedad a su maquinilla vintage, que la pasión pasa de súbito de platónica a carnal, una transubstanciación de papel mecanografiado a materia carnosa que ríete tú del milagro cotidiano de la misa del domingo: el verbo se hizo carne. Eso sí que es un deus ex machina y lo demás son hostias, literalmente. El recurso no es nuevo, en realidad. Ya en 1985, en "La mujer explosiva", de John Hughes (John Hughes, cineasta de culto del cine adolescente de los ochenta: "El club de los cinco", "La chica de rosa", "Todo en un día") dos chavales utilizan un ordenador para corporizar la mujer de sus sueños: les salió Kelly LeBrock, lo cual indica que la informática de entonces ya estaba realmente avanzada. Pero "La mujer explosiva" era la adaptación de un cómic y en ese universo el acto de crear un superhéroe (superheroína en este caso) admite cualquier excusa por descabellada que ésta sea.

Ruby aparece en la vida de Calvin y se desarrolla una trama romántica de lo más habitual (enamoramiento, celos, abulia, ruptura, reconciliación y vuelta a empezar), manipulada sin reparo, toque exótico de la historia, por la mágica máquina de escribir (que fíjate que me lo olía yo cuando se puso a teclear la primera vez, que me tenía que haber ido a la cama, cuando menos, que ese día cambiaban la hora y luego te levantas hecho polvo), conformando una cinta en la que está sobreactuado hasta el perro Scotty (las escenas en las que aparecen Antonio Banderas y Annette Bening... yo... he visto cosas que vosotros no creeríais). Paul Dano me ha gustado en otras películas en las que ha actuado, ("Pequeña Miss Sunshine", "Pozos de ambición", "12 años de esclavitud"), un secundario firme, de carácter, pero al asumir el protagonismo produce cierto empacho. Claro, que a ver quién es el guapo que le dice a la nieta de Kazan (y a los Dayton-Faris) que no. Casi seguro que escribió el papel de Calvin pensando en él, fijo que sí, pues en esta película la paradoja se revela en que no es Ruby Sparks la que brota de la fértil prosa de Calvin, sino el propio Calvin el que es pergeñado por la mente de Zoe Kazan. Todo queda en casa y a hincharse a comer perdices.

12 comentarios:

  1. Me he reído mucho con esta entrada. La película me gustó, me pareció una historia que aún no me habían contado. Sí me creo al protagonista como escritor angustiado ante la página en blanco, aunque me cuesta más imaginármelo como el autor de la gran-novela-de-la-que-todo-el-mundo-habla.
    Saludos.

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    1. Me puse a ella con toda la buena voluntad del mundo pero no, no le cogí la onda. Y lo de la originalidad... claro, es que tú no has visto "La mujer explosiva", cualquier día la cojo para que la veamos juntos, aunque me temo que te seguirá gustando más "Ruby Sparks"...

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  2. Mi querido Licantropunk, un texto muy bueno, ingenioso y divertido para hablar de una película que no te ha gustado...

    Pero sí te diré que Ruby Sparks me pareció una buena comedia romántica, otro reflejo del mito de PIGMALIÓN. Me gustó bastante más de lo que me esperaba. Te dejo, por si te apetece, el link donde explico por qué me resulta una obra interesante (http://hildyjohnson.ferfoto.es/?p=3026)... Me encanta cuando una película genera pareceres y miradas tan distintas. Yo no fui al cine a ver Ruby, la vi en dvd y me hizo pasar una tarde agradable. Últimamente creo que en el género de comedia romántica se están realizando obras muy interesantes, es un género muy pero que muy vivo.

    Por cierto todavía no he visto HER y de Kelly yo me quedé en La mujer de rojo...

    Besos
    Hildy

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    1. Me parece que lo peor que tiene esta película es el reparto, que en ningún momento consigue que pienses que no está viendo una ficción. Y por otro lado está el guión, totalmente sacado de la manga, nada por aquí, nada por allá. Sí, hay está Richard Linklater (finalmente me adentré en su trilogía) para demostrar qué se puede innovar quitando todo lo superfluo. "Her" me parece que es mucho mejor en esas dos comparaciones. Y la señorita LeBrock en todas las demás...

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  3. Ciertamente, una vez me enamoré de una mujer de un sueño. Este texto es genial, ya te digo, tu forma de escribir dan ganas de ver películas que de otras formas no las verías. Los directores de películas mediocres y sin expectativas deberían contratarte. Tendrían más espectadores de lo esperado. Un abrazo.

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    1. Ja, ja, muchas gracias Dario. Que este texto impulse a ver la película es algo que no me había planteado. En cualquier caso me interesa siempre que el lee la entrada juzgue por sí mismo. Seguro que el equivocado soy yo la mayor parte de las veces.

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  4. Pues a mí me hizo gracia, no es que me pareciera la releche, pero eso, me hizo pasar un buen rato. Este cine "indi" de gafapastas llorones y patosos me divierte, qué le voy a hacer! y siempre voy a verlo sin mayores expectativas de lo que luego me ofrece, quizás por eso.

    Y la banda sonora merece la pena, es graciosa igualmente.

    Saludos!

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    1. "Cine indi de gafapastas", ja, ja, buena definición. La verdad es que muy "indi" no me parece esta película. De la banda sonora casi no me acuerdo. Bueno, sí, sale la clásica "Ça plane por mui" de Plastic Bertrand, pero sería la enésima vez que suena en una película.

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  5. Mr. Licantropunk, el mundo de los escritores en Hollywood, en este caso, por suerte fue el amor, menos mal que no se necesito de una pildora como en Limitless. Pelicula simpatica que se deja ver. Cordiales saludos.

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    1. "Limitless". No sabía cuál era, he tenido que buscarlo. ¡Bradley Cooper! ¡No, por favor!

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  6. Excelente entrada. Lástima que la historia de amor caiga en los convencionalismos habituales del género. Francamente insípidos los personajes de Anette Bening y Antonio Banderas...
    Secundo la propuesta de Darío jejeje.
    Un abrazo.

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  7. Película de las calificadas, agradables. No entusiasma y tampoco disgusta, como bien dices entre lineas. Para quien quiera ver algo ligeramente cocinado y que sin llenar te haga matar el gusanillo......

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