miércoles, septiembre 10, 2008

"WALL-E", de Andrew Stanton


vida.

(Del lat. vita).

1. f. Fuerza o actividad interna sustancial, mediante la que obra el ser que la posee.


El ser humano abocado a la extinción como una especie más: todas terminan por desaparecer por una u otra causa. La última esperanza reside en la fuerza vital de un robot abandonado durante siglos entre los despojos de un planeta anegado de basura. Robinson Crusoe y su fiel cucaracha Viernes. La inteligencia artificial dedicada a la elaboración de algoritmos de supervivencia, de lograr un autómata autónomo que lleve a cabo su misión indefinidamente: hay mucho que limpiar y una máquina que dura setecientos años a pleno rendimiento, justifica cualquier inversión: la utopía del movimiento continuo. Tarea inútil de cambiar la mierda de sitio, de colocarla, de reducir su espacio, de disimularla, como barrer las pelusas del suelo para esconderlas debajo de la alfombra. La empresa privada, uno de los villanos preferidos de la ciencia ficción, se ha adueñado del mundo y ha pensado en todas nuestras necesidades (el discurso moderno del crecimiento sostenible suena como la oración de ánimas que las mujeres de La Alberca pronuncian al anochecer entre toques de esquila: marketing de cementerio). Si este planeta ya no vale, nos hacen otro y ya está, que siempre andamos quejándonos de todo. Consume hasta morir.
Replicante en busca de sentimientos, pistas, respuestas. Roy Batty asesina a su padre ajedrecista pero Wall-e no tiene impulsos homicidas, esa instrucción no figura en su código fuente. Su evolución (algoritmos genéticos: intuición darwinista) le conduce por derroteros de comportamiento humano, senderos de empatía entre pasos de baile y estallidos de burbujas de embalajes: robot, maduro por obsolescencia, busca ente tecnológico afín para entablar amistad. Y si la máquina es capaz de acercarse a la deducción y el aprendizaje, al cariño y la ternura, también es capaz de caer en la locura, locura cibernética que introduzca el caos necesario para que brote la lucidez: alguien voló sobre el nido del cuco de la clínica para automatismos desahuciados.
Las máquinas cuidarán de los últimos restos de la humanidad como la tía solterona que se encarga de acompañar el final de una abuela moribunda, simplemente por tener una misión que cumplir, algo que hacer, un motivo para levantarse por las mañanas. Humanidad agonizante atrapada en un cuerpo mórbido: sanguijuela insaciable hinchada hasta la invalidez. Y el esclavo acaba convertido en el amo, con la referencia inevitable al HAL 9000 de "2001: una odisea del espacio" de Stanley Kubrik (y también la música de Richard Strauss, claro).
Suficientes elementos para considerarla una obra maestra del cine de animación, donde más allá de unos personajes dedicados al público infantil (en su momento pensé que era una continuación de aquel "Cortocircuito" de John Badham; afortunadamente, no, pero el cacharro se parece mucho) anida una historia potente, fascinante. Una gran película.
(Me leo y me doy miedo: igual me he pasado un poco con el tono trascendente. De hecho, si le preguntas a Alicia que de qué va la película, te dirá que es la historia de amor de Wall-E y EVE. La típica comedia romántica, en fin).

8 comentarios:

  1. Es que lo de Pixar empieza a dar miedo, menuda conjunción de talento más afortunada. Cuando ya parece que no se puede hacer mejor, te sorprenden con la que puede ser su obra maestra más incotestable. ¿Dónde está el límite de esta gente?

    Un saludo!

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  2. Por eso es buen cine de animación, Licantropunk, porque los ojos de un niño lo disfruta sin complicarse al igual que los tuyos "complicándose"...

    Un besote.

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  3. esos tipos son unos genios, y tengo la idea de que mejorarán más todavía, cuando ingresen a otros géneros.

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  4. Muy buenas sus apreciaciones, y la verdad que la gente de Pixar son muy buenos en lo suyo, un saludo.

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  5. Muy buena la pagina.... encontre peliculas que no he visto! sigue...sigue!!!!
    caro

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  6. Deckard: pues sí. "Ratatouille" y esta son sin duda de lo mejor que he visto. Equilibrio genial entre público adulto e infantil.

    Margot: qué razón tienes. Yo elucubrando y Alicia simplificando de manera genial.

    Tan versátil: ¿a qué géneros se pueden dedicar? Espero que sigan muchos años "animando"

    Belknap: todos coincidimos: calidad garantizada. Y mucha, mucha imaginación.

    Carodada: últimamente me he dedicado a películas de gran público: racha buena de poder ir al cine.

    Saludos a todos.

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  7. Creo que detrás de ese visión romántica en realidad se esconde mucha trascendencia y muchas traducciones. Tengo ganas de verla, aún no he podido y la dejaré para el dvd, aunque aún está en los cines.

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  8. Preciosa e inteligente película. Tiene momentos de pura emoción.
    Y qué placer verla en un cine lleno de "enanos" que se portaron estupendamente, aunque el que estaba al lado mío no dejaba de moverse en el sillón, que le venía demasiado grande :)

    saludos

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