miércoles, enero 10, 2007

"The Queen", de Stephen Frears

La semana siguiente a la muerte en accidente de tráfico de Diana Spencer, ex-aspirante al puesto de reina de Inglaterra, proporciona el marco temporal a este retrato desmitificador de la monarquía inglesa. O de cualquier monarquía. Se muestra a la familia Windsor como a un puñado de privilegiados que viven apartados del pueblo al que supuestamente sirven. Tacaños, apolillados, rígidos y disciplinados, obsesionados con el protocolo, con la vida en el campo, con la caza (¿qué les pasa a los reyes y a las escopetas?). Diana, en cambio, era la princesa de la prensa rosa, de las peluqueras y los culebrones, popular y querida hasta el paroxismo: la pobre esposa embaucada, engañada: la débil plebeya. Al final, seguro que no era para tanto, pero quedaba muy tierna en las fotos.
La reina tiene que descender entre el resto de los mortales para salvar la credibilidad de la institución que representa, mermada por la frialdad demostrada ante el fallecimiento de su antigua nuera. Tiene que demostrar que sabe verter lágrimas de cocodrilo, como cualquier otra ancianita.
La película muestra ese proceso de humillación personal pero, sin embargo, no me parece que ese sea el aspecto más interesante, por obvio. Hay otro que sí lo es, mucho más patético: ver a Tony Blair transformarse, pasar de líder revolucionario de la izquierda moderna a primer ministro reaccionario y babeante, obnubilado por la presencia del poder antiguo, caduco y antidemocrático. Me da la impresión de que también se quiere contar eso. O sobre todo.

8 comentarios:

  1. Hola, he llegado a tu blog, buscando cosas sobre Chunking Express, es que soy un fanatico de Won Kar Wai, y asi de paso he descubierto tu blog.

    saludos

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  2. Encantado. Espero ver pronto el resto de la filmografía de Won Kar Wai, así que quizá volvamos a coincidir.
    Saludos

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  3. Probablemente sea lo que se quiera contar, porque al fin y al cabo lo de la reina ya se sabe, es inamovible. Pero la transformación de ese pinguino es sorprendente. Aún hoy en día.

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  4. El excelente retrato realizado por Helen Mirren, descubre una faceta personal de la reina que no sorprende en exceso. En cambio, hasta la mujer de Blair no reconoce a su marido. Cambiar para que nada cambie, decía el principe Salina en "El Gatopardo". ¿Sería eso la tan cacareada "tercera vía"?
    Saludos.

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  5. Me ha quedado pendiente esta peli. Soy fans (en plural) de Helen... a ver si la repesco antes de que la quiten.
    Abrazos, licántropo.

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  6. Hace poco hablamos de su excelente papel en la miniserie "Elizabeth I de Inglaterra": especialista en interpretar reinas: sobre todo en isabeles.

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  7. Ah, la inteligencia de un realizador, que apela a la agudeza del espectador. Percibo qué lo que dices, sí, es lo que Frears quiere suscitar en quienes ven la película.

    Ahora me falta ver el film.

    Gran salute.

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  8. Sí, a veces nos queremos poner en el lugar del director, intentar adivinar sus intenciones. Sobre todo si la película es buena.

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